Inés María Correa
PARA MUCHOS, en materia de seguridad, la principal pregunta es si se debe o no bajar la edad de imputabilidad. Pero ¿es ésa la verdadera pregunta, en un debate que ocupa tanto espacio en el mundo de las noticias? En realidad, la consigna mayor en estos tiempos debería ser: "Que no muera un solo chico más". Ningún chico: ni rico, ni pobre, ni brillante, ni poco dotado para el estudio. Ninguno. Los niños no deben morir en el país; deberían ya estar dadas las condiciones para que eso no ocurriera.
Los chicos son vulnerables, y por eso se los utiliza para el crimen, o como estandarte para buscar financiamiento de proyectos institucionales o personales. Pero son chicos y, como chicos, necesitan alimentarse bien, estudiar, jugar, que su salud sea atendida, ir de vacaciones; todos derechos que están escritos en la nueva ley sobre infancia, la 26.061.