Los chicos aprenden los que viven!!

Estos días venimos estremecidos por la historia, aunque lejana, no por eso inimaginable en nuestras tierras. Quizá aquí, y eso habla un poco mejor de nosotros, alguna luz amarilla se hubiera encendido para descubrir el caso antes de 24 años. En una de las notas que agrego, dibujan la frialdad de la sociedad austríaca, ¿nadie se dio cuenta en todos años que algo raro ocurría en la casa del terror?

Estamos muy lejos de Austria, pero sería loable que quienes juzguen a este monstruo humano no lo consideren insano, porque si fue tan "políticamente correcto" mientras cometía estas atrocidades, y no era avistado por nadie, pueda ser tomado como una persona que en uso de sus facultades, fue responsable de esos execrables actos.

Pensando en los chicos criados en cautiverio, tanto la madre como sus hijos, y los otros educados por el monstruo, podrán superar lo vivido en sus primeros años?

Cada día más, creo en ese concepto marcado a fuego en la formación de todos los que trabajamos en el tema: "los chicos aprenden los que viven". Si viven en la violencia, tenderán a la violencia, si viven en el amor, tenderán a los actos de amor. El otro día, conversando con mi sobrino Felipe de tan sólo 3 años de vida, hablábamos de fútbol, y aclaro, él tiene casi un lenguaje adulto, maneja mucho vocabulario. Y en mi apasionamiento por un cuadro de fútbol, osé decir "odio al otro equipo", cuando mi sobrino me preguntó -tía, ¿qué quiere decir odio?. Ni explicar que no pude responderle, por suerte no existe aún en su mundo el concepto de odio porque está criado con amor. Y sólo amor. Por eso es tan importante atender la educación de los chicos y cuánto nos estremece la historia de Austria!